Mujeres felices en el trabajo
Madres, esposas y exitosas profesionales; podemos serlo todo y desempeñarnos de manera excelente en éstos y los muchos otros roles que tiene la mujer. Sin duda alguna, la vida se disfruta más con nuestra sensibilidad y atención al detalle, lo que nos permite saborear mejor las circunstancias y las relaciones; y dichas cualidades son sólo algunos de los valores agregados del género femenino en el mundo organizacional.
Las neurociencias establecen que las diferencias entre los cerebros masculinos y femeninos son significativas, éstos últimos están diseñados con un cerebro más interconectado lo que otorga una superioridad mayor en las habilidades relacionadas con el lenguaje, el relacionamiento para facilitar la comunicación intuitiva que el cerebro masculino.
Cuando las mujeres progresan las empresas progresan” pero algunas organizaciones siguen desperdiciando el talento del cerebro femenino, por ello las mujeres son las perfectas para desarrollar el cargo del futuro la Gerencia de Felicidad Organizacional cuyo foco está en contar con equipos de trabajo armónicos, con culturas en felicidad generando productividad y rentabilidad.
Y con todo lo anterior, las empresas siguen estando lideradas en su mayoría por hombres y en varios lugares, por culturas o pensamientos machistas, que se abstienen de incluir en los cargos directivos o en la toma de decisiones importantes a las mujeres.
A lo anterior, desafortunadamente se suma un aspecto incluso más preocupante y es que entre nosotras mismas sigue habiendo una rivalidad que no cesa y hay mujeres que usan su perspicacia, no a favor, sino en contra de sus compañeras. Somos muy analíticas, críticas y la vara con la que medimos a las otras, está en un nivel con estándares muy altos, estándares que al mirarse de manera objetiva, son muy difíciles de alcanzar.
Si ese era el panorama antes de la pandemia mundial causada por el COVID-19; en Mide La Felicidad, una de las grandes inquietudes que nos surgió fue cómo esta situación había impactado la vida y la felicidad de las personas que estaban laborando y nos detuvimos a reflexionar en los grandes retos que supuso para todos por supuesto; pero pensar en el rol de la mujer trabajadora, acaparó gran parte de nuestra atención teniendo el trabajo, el hogar y los hijos todo en un mismo lugar al mismo tiempo.
Con eso en mente, desde el mes de mayo del 2020, desarrollamos la Medición Mundial de Felicidad Organizacional a través de un modelo que tiene como objetivo conocer los factores claves en felicidad laboral. Hoy en día han respondido casi 2.000 personas pertenecientes a 27 países lo que hace estos resultados muy enriquecedores y que adicionalmente dicha medición fuera divulgada en la revista de divulgación científica Neurociencias aplicadas a la 4 Revolución Industrial.
Encontramos que, en una escala de 0 a 100 puntos, el indicador global está en 55, lo cual nos evidencia que hay infelicidad por parte de los colaboradores pues no alcanza ni siquiera el mínimo esperado 60 / 100 y cuando miramos el comportamiento por género, nos damos cuenta de que las mujeres tenemos una puntuación menor de 54 / 100, lo que implica una alta infelicidad de las mujeres en su día a día en el trabajo.
Entre los varios indicadores que aquí se evalúan, se debe prestar atención a unos muy bajos en las mujeres tales como el miedo a cometer errores con 43 / 100 y el de la autoestima que es aún menor de 41 / 100.
No es un secreto que para la gran mayoría de los colaboradores ha sido complejo trabajar desde sus hogares al mismo tiempo que atienden sus hijos, casa, obligaciones y demás temas familiares, y me atrevería a decir que independientemente de la conformación de las familias, la mujer es el eje central en todo hogar, por lo tanto, la carga se les ha duplicado significativamente.
Esta dinámica centralizada alrededor de la figura femenina, ha demostrado el increíble poder y alcance del género femenino en esta época de pandemia y teletrabajo gracias a su compromiso, persistencia, vitalidad y dinamismo. Sacar adelante los múltiples proyectos personales, familiares y laborales, requiere de altas dosis de amor, autoconfianza, creatividad y disciplina.
El modo de pensar y sentir también es distinto en las mujeres y eso tiene mucho que ver con la Neuroplasticidad tan grande que tenemos las mujeres y la gran energía y capacidad interior que tenemos para ser mucho más resilientes y fuertes frente a los temas adversos que se presenten en el día a día para seguir mirando hacia adelante.
Es claro que en el mundo empresarial las mujeres están ganando terreno y teniendo mayor visibilidad cada día, pero este escenario sería una generalidad si recordáramos que juntas somos más fuertes, más poderosas y podemos potenciar equipos de trabajo felices logrando ser más influyentes en este mundo que tanto nos necesita.
Ser felices en nuestro trabajo y en todo lo que hacemos no es una opción, es esencial en nuestras vidas y en las organizaciones. Nunca es tarde para replantear nuestras creencias. Creamos más en nosotras mismas y en nuestra intuición.
Participa en la medición mundial de felicidad organizacional https://midelafelicidad.com/mediciones/medicion-mundial-de-la-felicidad/